El día 30 de octubre toca encender una nueva veladora, colocar un vaso con agua y un pan blanco para aquellos difuntos que se fueron sin comer o los que sufrieron algún accidente.
No hay que olvidar que en nuestro altar se colocan las fotos de nuestros seres queridos que ya no están con nosotros, así como pétalos de la flor de cempasúchil para guiarlos rumbo a nuestra ofrenda.

Si eres aun más creyente, puedes decir una oración por aquellas almas a las que esperamos el día de hoy.